sábado, 8 de julio de 2017

Los scrolls

Los scrolls

            En el año 4000 (aproximadamente) luego de la extinción del ser humano, en el planeta que llamamos Marte habitaban los scrolls, una especie similar a los humanos, pero con diferencias como su color de piel rojizo, su resistencia a altas y bajas temperaturas y su poder de vivir sin oxígeno.
            Cuatro individuos de la especie scroll querían viajar a un planeta muy lejano al suyo, “Solarium”. Este era un planeta que no se había investigado a fondo. Lo único que se sabía era su clima, desértico y con temperaturas muy cambiantes, algo que los scrolls podrían soportar fácilmente.
            Estos cuatro individuos se destacaban en diferentes aspectos: Xon Qüi era el líder y el más inteligente del grupo. Era de altura media; James Leutucamón, por su parte, era muy tecnológico, desarrolló un poder para mover objetos y ser más fuerte que el ser promedio de su especie; Chen Twing, a diferencia de James, era débil, pero su inteligencia, altura y conocimiento en el campo de la medicina eran los mejores del grupo; y por último, Blem Blind, tenía un gran conocimiento mecánico y este le daba un rol importante al grupo.
Para lograr el objetivo, con ayuda de otros especialistas, construyeron la nave A-14, con la cual viajarían a Solarium. Tardaron aproximadamente dos años en estar preparados.
¡Líder! Tardamos mucho pero lo conseguimos. ¡La nave A-14 está lista!
— ¡Muy bien equipo! Tardamos casi un fetsúma, pero lo conseguimos.
— Señor, ¿le digo a los demás que mañana despegamos?
— Claro, avísales. Despegaremos mañana e investigaremos el planeta nada más lleguemos.
Al día siguiente, los cuatro valientes scrolls subieron y la pilotearon. Viajaron 3 días seguidos tranquilamente, pero en el cuarto hubo un problema. El motor de esta se averió en la mitad del viaje.
Además, observaron por las ventanas, un objeto gigante dirigiéndose a esta. Al no poder pilotear por estar el motor descompuesto, James Leutucamón se vio obligado a intentar mover al objeto con su mente, pero este era tan grande que apenas lo trasladó unos centímetros. Por lo que rápidamente fue a investigar la falla del motor. Al darse cuenta de que era un problema complejo, llamó a Blem Blind.
En aproximadamente 15 minutos pudo resolver el problema. Lograron esquivar al objeto por apenas unos cuantos metros. Luego de este incidente, continuaron tranquilamente su camino hasta Solarium. Cuatro días después, llegaron a este planeta y aterrizaron la nave en su suelo rocoso y cálido.
Bajaron de la nave, inspeccionaron el lugar y encontraron una cueva. Los scrolls pudieron ver a un ser gigante de color naranja, con dos ojos y tres orejas. Estaba dormido en el piso pero se despertó al escuchar un estornudo de Chen Tuing.
Estos pelearon contra el ser viviente. Tuvieron que planear una táctica. Xon Qüi se dio cuenta de que él no usaba sus ojos para ver, sino que se guiaba únicamente por el sonido. Su plan era agarrar un arma de la nave y dispararle en los tímpanos, y así lo hizo. Pudieron derrotarlo y regresaron a Marte luego de investigar el planeta, llevando consigo al gigante.
Cuando llegaron a su planeta fueron rápidamente con los científicos para contarles sobre su viaje. Expresaron su sorpresa por haber encontrado solo un ser vivo en toda su expedición.
Los científicos examinaron el cuerpo de la criatura. Este tenía algunas partes biológicas que se usaron para crear la cura contra una gran enfermedad que afectaba a los scrolls, la chikawanga.
Además, investigaron los genes del gigante. Concluyeron en que la razón por la que hay tan poca vida en Solarium era la alta radiación que el hombre había provocado. Esta exterminó a todas las especies que conocemos hoy en día, incluidos, los humanos.







Autores: Ezequiel Herscovich, Luka Feroleto y Santino Pepi