martes, 5 de junio de 2018

Llegada Tarde

Por Matías Nuñez, 1° "A"

      Eras las 8:30 de la mañana de un Lunes y estaba llegando tarde a clases. Me llamo Malena y todos los días de la semana me reúno con mis amigos, Marcos y Hernández, para ir al colegio juntos. Nosotros tres siempre caminamos juntos, pero una vez sucedió algo diferente. Estaba esperando en la puerta de la casa de Marcos porque quedaba de camino al camino, pero no había nadie,así que empecé a tocar el timbre de la casa mientras llamaba a Hernández por teléfono pero no tuve respuesta alguna de ninguno de los dos. Después de unos poquitos minutos llegaron los dos y mientras caminábamos al colegio les pregunté:
-¿Por qué no llegaban? Ya estaba a punto de irme sola.-
      Hernández me dijo que no encontraba la llave para salir de su casa y Marcos dijo que no escuchó la alarma porque había regresado tarde a su casa de un cumpleaños de 15 y como estaba tan cansado se quedó dormido. La historia de Marcos era más creíble porque ¿quién no se ha quedado dormido alguna vez? Pero la excusa de Hernández no era muy creíble porque él es muy organizado y nunca se olvida las cosas. Pero eso ya no importaba; eran las 8:40 y teníamos que estar a las 8:45 en el colegio y solo nos faltaban 10 cuadras. Mis amigos ya sin ánimos decían que no íbamos a llegar pero yo aún confiaba.
      De repente, se empezó a escuchar un ruido detrás nuestro. Miré  rápidamente hacia atrás y me di cuenta que se trataba de una serpiente, así que empezamos a correr lo más rápido posible. Mis amigos no la llegaron a ver, solo yo lo hice. Corrimos hasta llegar al colegio y lo hicimos antes de que toque el timbre.
-¡Llegamos a tiempo!- dije y me empecé a reír ruidosamente y mis amigos me preguntaron:
-¿De qué te reís?¿ Acaso es gracioso que nos ataque una serpiente?-
      Les respondí que era era todo una broma para poder llegar a tiempo a clases y no nos pongan  un cuarto de falta.

FIN